sábado, 21 de enero de 2012

PRESENTACION VIRTUAL DEL POEMARIO "DAKAR, FLOR DE LOS DESIERTOS" DE CLAUDIO PUMA

DAKAR

Velocidad  encantada
entre rayos  y  arenas,
existes  en   el  amor  motor,
en  el  desierto  ángel  infinito.

Dakar,  marfil  y arena,
Amor  y  luz,
entre los amantes de la velocidad,
 existe  un   mundo de  eslingas.
Por eso  Dakar ellos  dejan  sus ejes multicolores
porque  aman  tus rutas de  flor del caracol.

En la  ruta estelar estás  Dakar,
Paisaje  Sonoro,
ausencia de Ángeles Cristalinos,
ruta fértil de cactus
donde se pierden  las  llaves maestras del movimiento.
¡Oh! Dakar, a veces pierdo el control,
para encontrarme  en  la luz  de la duna  infinita.



RODANDO EN  LA ARENA  INFINITA
                     
Arenas, aros,
Lagartijas, sueños,
timón  en  la luz,
amor entre  ruedas;
es la  vida la pasajera de este rally.

Rodando en la arena infinita,
tras  las travesías de mi amada,
me licuo en  el desierto,
y  en las curvas infinitas.

Me recuerdan a ti, las dunas
los hebras del sol,
los caballeros de  los  aros del desierto;
pero  pienso  volver  velozmente  a   ti,
para  descansar en tus  brazos de arena.









DAKAR :  OASIS  DE AMANTES

Que magia  veloz de la luz,
es Dakar  de mis amores,
por ti manejo mis mundos,
pasando  etéreos  desiertos,
entre oasis de  amantes.

Manejar en  el  rally Dakar,
es amar a los meteoritos,
correr  con amor y pasión infinita,
uniendo fluidos  espacios,
con sed de velocidad,
con  sed  de tiempos,
con sed de Marías.

Al  final quedan las huellas de los corazones,
hojas de rutas  colgantes,
vientos  calados,
y   la  bandera  a cuadros de  abrazos.







OJOS  DE  ARENA

Manto    encantado,
 cuerpo  de  mujer,
otros  partieron  por ti,
pero  todos alzaron  vuelo  uno tras alguien,
con las esperanzas  de  ser  el  Cid,
pero a veces  el destino  es  azul.

En pleno desierto,
ellos  son las  luces  de arenas,
que bailan  al  son  de la luciérnagas,
y  se vuelven ojos  eternos.

En el camino existen   palomas alegres,
ojos de  agua,
 amantes  veloces,
meteoros que llevan  a  la amistad,
a la solidaridad,
y   a  la  luz,
hasta el río  final.







BANDERA  A  CUADROS
 La partida es lúcida y  traviesa,
fermento  de aplausos,
besos  veloces,
y  otras banderas  de adioses.

En el camino azulean los  círculos,
pero los frenos  frenan al tiempo,
y  el corazón acelera en las curvas,
y   los  pilotos azulean, adelantan
rueda  a rueda,
pasando túneles  del  tiempo,
bajo  las vértebras  de la velocidad.

Por fin aparece la bandera  a cuadros,
eclipse  del desierto,
piano  del  vacío,
trueno  del   fin,
respiro  estacionado,
y  finalmente
están  las copas con lluvia bendita del  laurel.







FESH-FESH   DE  DAKAR
Todos sabemos que en el desierto  existen  vidas,
ahora podemos decir  serpentea  la  velocidad,
rutean  los  amores,
y  reverdecen  frutas  de  Dakar para todos.

Los  fesh -fesh  de  Dakar son:
las  naranjas  veloces,
los  azules  espaciales,
las  rojas  corazonadas,
las  blancas  fantásticas,
las  verdes  ilusiones,
las  negras  epicúreas,
y  los amarillos siderales.

¡Oh! ¡Dakar divino!
Riega  mis desiertos  humanos,
con tus  aros  benditos,
para  morir amándote  en  el  futuro.








 DAKAR,  FLOR  DE LOS  DESIERTOS
                      
En los  desiertos  existe una flor larga
que  endulza  los corazones,
tiene los pétalos  cristalinos,                                                                                                                                                                                                                                                                                 
y  las   raíces  rodantes.

Se llama Dakar,
La bella  centella,
corazón  de fuego,
de movimientos  eternos,
y  motores  de amistad.

Dakar  es  una bella caravana  de  luz  encantada,
que tiene ritmos  entre  hojas  del  viento,
y   nos  lleva  dulcemente al  desierto,
para  vivir  entre alegrías y aplausos  acelerados.
¡Oh! ¡Dakar, flor de los desiertos! ¡Te amo  velozmente!









DAKAR EN EL ALMA  DE ATACAMA

Acelerando en el desierto de Atacama,
entre colinas, cactus,  torcazas,
y  un mar de dunas,
están los  centauros  modernos  avanzando.
 Dakar esta  acelerando  el alma en  silencio
entre los bosques pretéritos.

Acelerando en el desierto,
anidando  en  cada  duna,
es como purificar el alma,
como  salirse del cosmos,
es en fin, como amar entre  las colinas.

Todos pasamos  acelerando por el desierto,
como canarios escondidos en el silencio,
 y  mirando  al  colindante  mar Pacífico,
pero  los  rugidos de los bólidos,
nos  levantan  el alma al cenit,
¡Dakar  de nuestras   almas pasajeras!
CLAUDIO  PUMA

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