22 de diciembre de 2016 (PS) Si las guerras trajeran soluciones que sigan
habiendo guerras, pero es todo lo inverso, las guerras en el mundo son
dirigidas por manos no santas, lo que está ocurriendo en Siria no tiene nombre,
están prácticamente exterminando una cultura humana. Y si caemos en el lema ojo
por ojo y diente por diente, son los líderes que aman la paz, aman el
desarrollo, aman al prójimo quienes paguen el precio de las altas cúpulas que
participan en las guerras. Por eso decimos Alto a la Guerra en Siria, por Dios.
Tampoco nos alegramos que un pistolero asesine a un líder ruso propulsor de las
buenas relaciones con Turquía, como lo fue el embajador ruso Andrei Karlov, lo
real es que el pistolero gritaba a viva voz
en contra los bombardeos en
Aleppo-Siria y Dios es grande. La
respuesta del gobierno ruso de Putin es que lo declaran como un nuevo héroe
ruso al ex embajador Karlov, quien amante del arte fotográfico hizo lo posible
para la exposición denominada “Desde Kaliningrado a Kanchatka en los ojos de
los viajeros”
CLAUDIO PUMA
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