16 de octubre de 2020 (PS) Continúan los graves problemas económicos
causados por la pandemia del Covid 19 en los países del Tercer Mundo, y en especial
en los países como Venezuela, Bolivia, Ecuador y Perú de los cuales se extraen
sus riquezas para llevárselos y darles un valor agregado en los países
industrializados. Según el último informe de las proyecciones de la economía
global del FMI, para 2020 y 2021 llegaría a -13% de contracción del PBI de Perú
en este 2020. Estas proyecciones solo son un rebote estadístico puesto que anteriormente se dijo que en el
Perú el PBI crecería el 6.5% y ahora dice el FMI llegaría a 7.3% Pero para este
año 2020 el PBI podría ser de mayor contracción económica y un poco superior a
Venezuela cuya contracción llega a -25%.
En
cuanto al desempleo el Perú llegaría al 12.5% a fines del 2020 y para el 2021
de acuerdo a la reactivación económica llegaría al 8.8%. Para muchos
economistas peruanos muy optimistas el
Perú podría recuperarse más rápidamente de lo calculado. Pero resulta que a uno
de los protagonistas de la generación de riqueza del país, como son los trabajadores manuales
e intelectuales no se los escuchó en el famoso Consejo Nacional del Trabajo,
según la representante de la CGTP, Carmela Sifuentes, la mentada suspensión perfecta
afectó a toda la masa trabajadora y solo se escuchó a la patronal CONFIEP, a
quienes no les interesa la salud de los trabajadores peruanos.
Creemos que para darse esta famosa
reactivación económica, se debe mejorar la calidad de vida. ¿Y cómo? Simplemente
aumentando el valor del precio de la mano de obra directa e indirecta; y
mejorando pronto el Sector Salud por parte del Estado peruano.
CLAUDIO PUMA DIRECTOR DE PS AFILIADO A LA ANP- FIP
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